Poder escribir las páginas de nuestra vida

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lunes, 12 de marzo de 2012

Todo llega, todo pasa

Llega y te sorprende.
Llega y no te da opciones. Porque sabes que no depende de ti, no depende de lo que tú quieras, sino de lo que tú sientas. El amor es así de imprevisible, impredecible e increíble.
Llegó. Llegó un día. Un día como otro cualquiera, como otro chico cualquiera, y todo era normal, todo era como siempre.
Viste algo especial en él, viste esa magia que no todas las personas tienen, es como si los polvos de Campanilla estuviesen condensados en una misma persona, esa persona que te hace volar, que te hace alcanzar la eternidad con tan solo una mirada.
Días, días, días, días y más días, y no sabías si lo que ocurría era de verdad, no sabías si estabas confundida porque necesitabas olvidar, o realmente cada privado te hacía vibrar, cada Whats App hacía que la mayor de las sonrisas se dibujase en tu cara.
Sin presiones porque su situación no era fácil, y sabes de sobra que ningún clavo saca a otro clavo, y tenías miedo, quizá miedo a que tus sentimientos fuesen de verdad y tú, para él fueses una más. No podías permitirte el lujo de seguir tropezando, de seguir sin levantar la cabeza… Duros golpes, muchas lágrimas y esperanzas poco alentadoras habían inundado los meses anteriores.
-          Ninguno es de verdad, no merecen la pena, no hacen más que daño y no valoran lo que realmente les damos.
Le ayudaste a tomar una decisión, a saber mirar más por sí mismo que a mirar por el resto, a quererse y a recuperar el tiempo perdido, pero siempre demostrándole que ibas a estar a su lado. Porque te importaba, y porque veías que en sus ojos había rencor, y muchas, muchísimas ganas de vivir algo de verdad y con ilusión.
Lo conseguiste, y esto no es ninguna carrera, en la que hay un ganador o un perdedor. Hay un sentimiento que va creciendo cada día más. Esto no ha sido una lucha por conseguirle, sino una recompensa porque ambos os merecéis ser felices.
Una llamada, una ilusión.
Una llamada, una cita, un beso, y otro, y otro y otro… y la noche hizo el resto. Empezaste el año de la mejor manera posible. Con él, con ellas, pero con unas ganas tremendas de decirle al mundo que estabas feliz, y que querías que esa felicidad fuese duradera.
Un sms cuando llegaste a casa, pidiéndole que esto solo fuese el principio.
Y así fue, tu deseo se hizo realidad. Él, sus palabras, sus besos y sus abrazos acabaron siendo tu día a día.
Miedo, mucho miedo. Sabías demasiado de él, de lo qe había pasado, de cómo era, y en absoluto querías que pasase lo mismo. Deseabas con todas tus fuerzas que eso llegase a ser una historia de verdad, dejando ambos el pasado atrás y empezando a vivir el presente, y por qué no, a construir un futuro, al fin y al cabo, ÉL ES LO QUE SIEMPRE HAS BUSCADO Y POR FIN, LO HAS ENCONTRADO.
Dos meses y medio. Y sigues sorprendiéndote de lo mucho que puedes llegar a necesitarle, de lo grande que se hace ese sentimiento, y de que se ha convertido en parte indispensable de tu vida.
Y hoy, después de ese beso de despedida, te reafirmas en lo sentido. Es él. 

viernes, 11 de noviembre de 2011

¿Y ahora qué?

Estimado futuro presidente del gobierno:
Me llamo Alba y soy una estudiante de Filología Hispánica. En mi promoción universitaria somos 6 matriculados en esta carrera, somos pocos (es cierto) pero también le digo que selectos y excelentes. Nuestras notas rozan casi la perfección y estamos aquí porque amamos lo que hacemos y porque el día de mañana (si se nos permite dentro del país y si no, lo tendremos que hacer fuera) queremos disfrutar trabajando en un campo hoy casi extinguido en los planes educativos.
Mi planteamiento como joven y ciudadana española es el siguiente: ¿Qué será de nosotros?
En estas elecciones, ejerceré mi derecho y mi DEBER de votar como buena ciudadana. 
Puedo entender los planteamientos de unos acerca de la política de austeridad y potenciación del trabajo me parecen una forma estupenda de solventar casi todos los problemas económicos por los que España está pasando.  También entiendo que haya recortes, que se congelen los salarios y que la gente proteste por ello porque todos los cambios provocan descontento. Al fin y al cabo, el nivel de vida en tiempos de crisis no puede ser el mismo, y se nos ha ‘malacostumbrado’ a creer que todo es de todos y no es así (y en absoluto me considero clasista porque vengo de una familia humilde y trabajadora)
Mi padre lleva en paro tres años, mi madre ha sido ama de casa toda la vida. No salen puestos que puedan desempeñar, ni ellos ni otros 4.999.998 españoles. No pueden pagar el piso, y no sabemos qué será de nosotros de aquí a unos meses si la situación sigue en este ‘plan’.
Yo llevo estudiando 3 años, con excelentes resultados académicos porque siempre he luchado por lo que quiero, y es algo que no solo debo a mis padres, sino que debo también a los docentes que me han enseñado a amar lo que estudio y hago. Seré una de las pocas rarezas que queda sobre este país. Como ya le he dicho antes, somos 6 alumnos en clase, unos queremos dedicarnos al oficio docente y otros quieren continuar investigando…
Hasta hace unos meses pensé que cuando acabase la carrera e hiciese el fabuloso máster para estudios secundarios (que cuesta la friolera de unos 2000€) podría estar preparada para presentarme a unas oposiciones dentro del estado español.
Ahora, las dudas me inundan:
-          ¿Por qué si lucho con excelencia por lo que hago tengo tantas dudas?
-          ¿Por qué nadie, ni tan siquiera la Universidad como institución que depende del Ministerio me asegura apenas nada?
-          ¿Qué será de una alumna brillante si el día de mañana mis padres no me pueden pagar los estudios y no hay becas?
-          ¿Los ‘pobres’ no tenemos derecho a estudiar y soñar con un futuro mejor?
Quiero opositar y no para ser una ‘tragona’ más del sistema público y tocarme los pies a tres manos, sino que quiero ser eficiente y responsable con el cargo al que aspiro. Aspiro a formar futuras joyas españolas, deseo pulir (desde mi campo de actuación) diamantes en bruto. Quiero demostrar que aprender no es algo aburrido e inútil, sino que merece la pena formarse para crecer como persona y como ciudadano.
Los sentimientos que noto a nivel general entre los jóvenes son la apatía, el tedio y la desconfianza de un sistema que no se sostiene por sí mismo. Porque nadie nos asegura qué pasará y porque nadie nos da soluciones concretas a nuestros problemas.
Pertenezco al plan viejo en el que aún existen Licenciaturas, Diplomaturas…etc. Los nuevos Grados implantados por el sistema de Bolonia, que  abren el “marco común europeo”, están afectando los últimos cursos de estos antiguos planes.
Bajen de las esferas, pongan los pies en la tierra y hagan un trabajo exhaustivo de campo, como nos toca hacer al resto. Pregunten cuál es la situación actual, cuáles son nuestras incertidumbres y escuchen, porque aunque seamos jóvenes, NO SOMOS TONTOS y algunos tenemos más que claro lo que queremos hacer con nuestra vida el día de ‘mañana’
Si no puede ser en este hermoso país del que soy ciudadana, pues me tocará buscarme el pan en la ‘Conchinchina’, pero no duden que lo haré porque YO SÍ LUCHO por crecer como persona, y porque YO SÍ me preocupo por lo que pasa a nuestro alrededor.
Menos pasteleo económico, bajen los sueldos a quien se los tienen que bajar, y doten a la sanidad y a la educación públicas de un nivel de excelencia superior al resto de Europa, y para que luego venga Ángela Merkel a decirnos nada…
Si queremos, podemos; si podemos lo mantendremos, y de eso que no le quepa duda.
Muchísimas gracias por leer las preocupaciones de una joven española.

martes, 13 de septiembre de 2011

A ver si se borra tu voz

Piedra, papel o tijera. Cara o cruz. Juegos en los que la casualidad nos brinda su rol más importante. 
Casi parecido a lo que ocurre con el amor. Nadie es capaz de controlar los sentimientos, nadie es capaz de prever de quién o de quién no se enamora. Casi todo es decisión del corazón.
Toda tu vida se ha visto envuelta en triángulos equiláteros en los que las dudas, los remordimientos, las cábalas y las balanzas de nada sirvieron cuando los sentimientos apretaron fuerte. Esos triángulos pasaron a ser isósceles en los cuales un lado era más pequeño que los otros dos.
¡A la porra los pros y los contras!, ¡a la porra la cabeza! Arriesgar para ganar o perderlo todo, intentarlo, hablar o callar para siempre. Sientes y hablas sin pensar a veces el daño o el bien que puedes estar causando con tus palabras.
Amistad, Amor, Ruptura. Tu vida ha sido una sucesión de ellas, al igual que estar rodeada de un paradigma verbal muy común: 1ª, 2ª y 3ª personas del  singular.
Como siempre en la vida, una primera experiencia hace que en las sucesivas no cometas los mismos errores, et voilà! Suena egoísta, pero llega un momento en el que te planteas dejar de pensar en el resto, para pensar en lo que verdaderamente quieres, o sientes, o necesitas, en resumidas cuentas: en lo que deseas.  Lamentablemente Pepito Grillo un día se cansó de ti y te abandonó para dejar que te guiases a través de impulsos. Cada latido es una decisión, cada latido es un paso en la vida. Tu corazón bombea tus sentimientos para que tu sangre recorra todas las venas de tu cuerpo curtido en malas experiencias.
-Pero esta vez es distinto- piensas. Esta vez es más complicado. Reprimiste tus sentimientos desde el primer día. Demasiado especial, un flechazo demasiado fuerte. Una confianza extrema, una complicidad abrumante. MIRADAS, PALABRAS, ACTOS QUE OS DELATAN. Dudas, citas, horas y horas hablando, nada más. Con sus palabras era suficiente para alimentar tus ganas de seguir. Demasiado para ti, te mordía el alma, te hacía daño pensar en él.
Tentaciones de dejarlo todo y empezar a caminar amarradita a él.
-Venga, no lo niegues, estás enamorada hasta los huesos- parece que Pepito Grillo volvió para hacer que estas palabras resonasen en tu cabeza, se metiesen tan dentro que hasta en tus sueños apareciese él, él, él.
¿Cuántas veces sentiste esa magia?, ¿cuántas veces miraste a alguien tan fijamente?, ¿cuántas veces antes habías dicho no voy a dejar que te me escapes?, ¿cuántas veces soñaste con ese beso que no llegó?
Te arrepentiste, lloraste y hoy, una vez más, vuelves a llorar. “Por el miedo a equivocarnos” de Maldita Nerea tiene parte de culpa, pero… nunca mejor dicho.
¿Amistad y punto? NUNCA

miércoles, 24 de agosto de 2011

Houston, tenemos un problema.

Parece que todas tus lágrimas y suplicios no son suficientes.
No soportas las injusticias que se llevan a cabo contigo. Siempre contigo. Todavía estás esperando el día en que se te de la razón por primera vez en este tema. No tienes nada que hacer, y no es envidia sino rabia. Rabia porque cada día ves lo difícil que tienes que te crean ante sus palabras, rabia porque consideras que tu adolescencia ha sido una sucesión de injusticias.
Solo estás tratando de que ellos la conozcan igual que tú. Que no es un caso perdido y que tiene solución.
No entiendes por qué narices no utilizan algunos medios que utilizaron contigo. Quizá no han sido los mejores, pero han surgido efecto.
Lo que no es normal es que exista falta de comunicación entre un padre y un hijo. Lo que no es normal es que tengan que rogar explicaciones.Lo que no es normal es que les estés poniendo en bandeja las pruebas del delito y la confianza siga siendo más que ciega.
No porque los tiempos hayan cambiado las maneras de educar también. Está claro que nadie es igual a nadie, y que los carácteres son distintos en cada caso, pero no son maneras de educar.
Ni tanto ni tan calvo. Tú agradeces, en el fondo, esa mano dura. Sabes que no has sido la mejor hija del mundo, pero tampoco crees que lo hayas hecho tan mal como para pasar lo que estás pasando. Que no estás montando un mundo, que te sientes mal de verdad. Que no eres tan mala, y que llevas años ofreciéndole tu ayuda, día a día, hora a hora porque la quieres más que a nada en este mundo.Y que por eso te duelen los desprecios.
Jobar, que tener 16 años y no poder salir con tus amigos duele, pero más duele ver que con la misma edad no hay barreras. Duele no tener una hermana mayor a la que recurrir cuando necesitas ayuda y a la que puedes contar todo y con la que puedes salir de fiesta, pero más duele tener una hermana pequeña que no valora todo eso. Duele tener unos padres que pasan de ti, pero más duele tener unos padres que han hecho lo imposible por educarte como se merece y ver que tu hermana no lo valora.
Todavía no entiendes por qué... por qué tanta mano dura con una y por qué tanta permisividad con la otra. Por qué luchar por un camino recto y por qué no intentar que el desviado vuelva a su cauce.
No pides lo mismo, pero pides algo equitativo. Los disgustos te los llevas tú después de intentarlo mil veces, por las buenas o por las malas, después de haber ofrecido tu ayuda de manera desinteresada, de manera apetecible y entretenida. Todo es poco. Todo es poco para que se valore que ya no eres una niña, para que se den cuenta que si no fuese por la falta de autosuficiencia serías una adulta responsable que podría encauzar su vida sin necesidad de más apoyo.
Quizá va siendo hora de darse cuenta de que vuelos tan altos terminan aterrizando. Quizá cuando aterrice sea por obligación, porque el piloto no tiene la experiencia suficiente y todo eso le ha venido grande. Quizá el vuelo debería ser controlado desde una torre de control. Esa torre de control que te hizo poner a ti los pies sobre la tierra.

jueves, 21 de julio de 2011

Traicionera locura

Eres muy pequeña aún para saber lo que es el amor. No tienes más que 16 años y muchas historias vividas. Más malas que buenas, más perdidas que ganadas. Lágrimas derramadas ¿a cambio de qué? De nada, de dolor.
Has crecido demasiado rápido a la sombra de, para lo que todos es, tu ejemplo a seguir. Sabes que no sois comparables, pero sí compatibles. Hasta hace 4 años no os soportabais y el caso era “joder al prójimo”. Hoy, ella es tu vida, tu mejor amiga, la persona que mejor te conoce, tu conciencia, tu confesora, tu alcahueta, tu tapadera, tu paño de lágrimas, la que te saca de los líos. Ella es tu hermana,
Ella ha sabido comprenderte e intentar sacarte siempre una sonrisa. La has fallado y defraudado muchas veces pero ella jamás te guardará rencor. Te sientes identificada con ella, con sus historias, con su novela. Ella ha sido siempre la cabeza asentada, tú siempre has sido la cabecita loca. Por mucho que cambie la cosa, esos roles siempre permanecerán intactos.
El primer amor marca, el segundo ayuda a olvidar y el tercero enseña. Cualquier fallo es una lección de vida, cualquier error es digno de admiración. No mires atrás ni des pasos en vano. No te dejes llevar por la confusión, no te arriesgues a perder aquello por lo que tanto has luchado.
Locuras, primeros besos, engaños, lágrimas… ¿crees que todo eso ha merecido la pena?, ¿has sido realmente feliz con todo lo que has hecho en el pasado?, ¿te arrepentirás de tus actos cuando crezcas? NO, NO, SI.
Las locuras pasan factura, créeme, no son buenas compañeras. La traición es una tentación que camina paralela a la honestidad, y solo si tú quieres, lograrás que nunca junten sus caminos.
Los recuerdos no son el presente. El presente es quien te acaricia cuando lloras y no el que te hace llorar. Al fin y al cabo los recuerdos no son más que recuerdos.
No siempre cualquier pasado fue mejor, y si no, mira lo turbio que se tornó.
No sabes lo que es el amor ciego, nunca lo has experimentado, pero tranquila, eso llega sin forzarlo y cuando menos te lo esperas. Hasta entonces disfruta, ríe y vive (con moderación) y de la mano de los que siempre te acompañarán y de quien tú quieras que te acompañe.
Recuerda que aquí siempre vas a tenerme y déjate aconsejar por las voces de la experiencia.

domingo, 10 de julio de 2011

Butterflies

No eres bruja, por lo tanto no puedes predecir el futuro.
Si algo has aprendido todo este tiempo es que los juicios acerca de tu futuro más lejano, siempre son inciertos. El sino cambia a su parecer, juega a su antojo con nuestras almas y reformula nuestras vidas como le viene en gana.
Tu mente, como la de cualquier adolescente viaja a lugares insospechados, sin saber que todas esas divagaciones pasan factura, y que todas y cada una de ellas van a hacerte llorar hasta el punto de hundirte hasta el nivel -10.
15 años y toda una relación por delante, lo único que hiciste es imaginar cómo serían los días con él, cómo sería una vida junto a él, pero nada más… no imaginaste gran cosa porque algo en ti sabía que no llegaría lejos, que todo terminaría, por mucho que luchases, por mucho que intentases sacar a flote algo que llevaba muerto mucho tiempo. Demasiado ciega para tantas señales. Señales acústicas y de humo…  Humo fue en lo que se convirtieron todos esos sentimientos que tantas noches te mantuvieron en vilo.
Pese a todas las caídas y sucesivas remontadas, nada ni nadie te ha hecho perder jamás la fe en el amor. Sabes lo que ello significa, sabes que es vital y necesario para una persona. Amar, y ser amado. Corresponder y ser correspondido.
Alguien, y él lo sabe bien te hizo volar. Te atontó, te enamoró más que ningún otro, te quiso, te comprendió. Aquellas tardes tirados en el sofá, en el parque, en la cama, donde fuese. Aquellas conversaciones sobre todo lo que iba a ser vuestro futuro. Vuestra casa, vuestros dos niños, los nombres, los muebles, los viajes… todo, todo, todo parecía tan perfecto… de hecho no lo parecía, sino que lo era. Has seguido enamorada de él después de todo este tiempo, sabes que siempre guardarás esos momentos, esas sonrisas, esa complicidad, esas intenciones de que él fuese el padre de tus hijos... En definitiva, siempre lo recordarás como un GRANDIOSO Y BUEN RECUERDO.
Todo lo que empieza acaba, y acabó. No sabes si tenía que ser así, lo propiciasteis, o lo buscasteis, el caso es que dolió más que una flecha en el corazón.
Un año pasó desde entonces, desde aquel adiós, desde que decidisteis seguir pensando que jamás se acabaría lo vuestro, que aunque no fuese el momento, volveríais, cuando fuese, pero que estaríais juntos.
No sabes lo que pasará mañana, lo que HOY tienes claro es que has encontrado a una persona genial, distinta y que te hace sentir como una princesa, que todo lo que digas es poco para definirlo. No quieres pensar en el futuro, quieres vivir día a día lo que te regala, los besos, las caricias, todo eso que hace que vuelvas a sentir mariposas en el estómago. Todo eso que creíste olvidado, todo aquello que no querías sentir… Pero al fin y al cabo nadie puede resistirse a la fuerza del amor.

martes, 14 de junio de 2011

Bésame sin miedo y con el corazón

De camino al centro en tu Ipod suena Besos de ECDL y de repente te preguntas: -¿a qué saben los besos?-.
Los besos saben de manera diferente dependiendo de la boca de la que vengan, en sentido metafórico. Hay besos que “saben” mejor que otros. Hay besos que no se olvidan y besos que son mejor olvidar.
No has besado a muchos chicos, de hecho creo que los puedes contar con los dedos de las manos. No es una cosa que te preocupe… como dicen: la española cuando besa, besa de verdad. Lo mismo da a cuantos beses si lo haces porque te apetece o quieres.
Aún recuerdas tu primer beso con 14 años. Eras la única de tu grupo que no había besado un chico, pero no era algo que te importase, sabías que tu primer beso sería con una persona especial…(bueno, como todos) Desde entonces cada beso empezó a tener distintos matices: amargo, salvador, pícaro, necesario, amical, furtivo, de verdad, liberal, deseado…
Besos que han durado segundos, besos que han durado una eternidad, besos que no debían serlo, besos que llevan a algo más, besos que alejan, besos que acercan, besos que dicen todo, besos infieles, besos que enganchan, besos que hacen sentir mariposas en el estómago, besos salados, besos dulces, besos de buenos días, besos de buenas noches, besos bajo la lluvia, besos de risa, besos de verdad, besos interrumpidos…  sea como sean eran besos que tenían que ser besos y punto.
Parecerá increíble pero recuerdas cada beso como un amuleto grabado a fuego. Que parecerá cursi pero en cada beso entregas una parte de ti, que cada beso es un recuerdo y que cada beso dado es una experiencia, un momento o un deseo. Lo bonito es escuchar… “me encantan tus besos”
Que quieres que esos besos que ahora te dan duren mucho tiempo, que quieres que esas mariposas no se escapen, que quieres que se queden encerradas en el estómago por mucho tiempo. Que deseas que esos besos no se acaben nunca, porque con cada uno jurarías rozar el cielo…
Besad amigos, besad. A quien queráis, donde queráis, pero hacedlo. Atreveros a besar. En la mejilla, en la frente, en la punta de la nariz, en la boca. Picos, muerdos, morreos… ¡QUÉ MÁS DA!
Lo bonito es sentir que la otra persona siente que los besos son de verdad. Lo bonito es descubrir que el sentimiento es recíproco.